07/12/2020
1. 26 millones. Se destapa
un chat de militares golpistas.
Jueves 3 de diciembre de
2020, se aprueban en el Congreso de los Diputados los Presupuestos Generales
del Estado con 189 votos a favor, una mayoría más amplia que en la
investidura. El acontecimiento es de suma importancia por varios factores.
En primer lugar se pone fin definitivo
a la etapa Rajoy al poder contar el Ejecutivo de coalición con unas cuentas
propias sin seguir prorrogando las de Montoro, síntoma de que el largo
interludio que comenzó en la moción de censura de 2018, quizá en los episodios
de Ferraz de 2016, llega a su fin.
En segundo lugar, estas cuentas
permitirán al Gobierno dirigirse a la Unión Europea con el timón entre las
manos, al presupuestar los 20.000 millones en ayudas, lo que supone, o debería
suponer, el fin de las políticas austericidas: desde hace décadas nunca se
habían visto una cuentas tan expansivas como estas.
En tercer lugar, esta es la confirmación
de que la legislatura podrá ser larga y la coalición fuerte, al menos de forma
potencial, descontando maniobras electorales y escapadas en solitario. Sea como
sea hablamos de un momento de cambio que marcará la década: en lo político, en
lo económico y en lo social. Un miércoles 12 de mayo de 2010 marcó la anterior.
Martes 2 de diciembre de 2020, últimas horas de la
noche. La periodista Alicia Gutiérrez publica en Infolibre Chat de los militares unas
conversaciones de Whatsapp de un grupo de militares retirados donde se lanzan
proclamas golpistas y se profieren expresiones violentas.
Ya hemos asistido a episodios similares en estos últimos años, quizá el más
llamativo el caso que implicaba a miembros de la Policía Municipal madrileña
contra el Ayuntamiento de Carmena.
Sin embargo esta vez hay algo diferente: el eximente de
calificarlo como el calentón de unos viejos uniformados nostálgicos del
franquismo se queda corto, tanto como la coartada de tratarse de una
conversación privada sin mayor recorrido.
El mismo día que el Gobierno de coalición se asienta definitivamente, conocemos que estos militares maniobraron repetida y conscientemente para alterar la elección de la soberanía popular. La noticia, que pasa desapercibida en los informativos del mediodía, va tomando fuerza según pasan las horas. Una entrevista, en Hora 25, al teniente coronel José Ignacio Domínguez, Cadena Ser declaraciones del Teniente Coronel del Ejercito es esencial para empezar a entender la gravedad de lo ocurrido.
Domínguez fue portavoz en el exilio de la histórica Unión Militar
Democrática (UMD) y actualmente forma parte del Foro Milicia y Democracia.
Integrante del grupo de Whatsapp, inicialmente un espacio informal de la XIX promoción de la Academia General del Aire, contesta a las
preguntas de Pepa Bueno dando un testimonio tan revelador como escalofriante.
"Ha habido y hay un movimiento [para el pronunciamiento
militar]. Ellos aspiran a que haya una dictadura [...]. En marzo, coincidiendo con
la radicalización de Vox, empiezan estos mensajes [...]. Coincide con lo que
llamaron Operación Albatros, esto de crear un
Gobierno de salvación nacional. Querían nombrar de
presidenta del Gobierno a la ministra de Defensa [...]. Empezaron a tratar de
movilizar al resto de las promociones del Ejército del Aire y contactaron con
la del Ejército de Tierra [...]. Como desistieron de ver al rey, acordaron lo
de las cartas y movilizar a los demás. No solo se conformaron con eso. Es un
movimiento".
Domínguez ya había expresado sus preocupaciones públicamente el 2 de agosto en un artículo titulado "El golpe que no cesa" el golpe que no cesa, que leído ahora cobra un nuevo sentido. En el mismo describe el modus operandi de la ultraderecha, llenando chats privados de militares con bulos y consignas de levantamiento contra el Gobierno entre marzo y mayo, en los momentos más duros de la primera ola, incluso dando consignas de boicot a la actuación policial en las caceroladas.
También cita a Vox, en su opinión causante del clima de crispación, y los saludos que Abascal dirigía a estos grupos, algo que se ha comprado como cierto esta última semana. "Si su majestad no actúa en un breve espacio de tiempo será función de los generales actuar en defensa de la Constitución y España" fue una de las cientos de manipulaciones que llenaban aquellas conversaciones, atribuida falsamente al jefe del Estado Mayor, en una estrategia clara de confusión agitativa.
Que los mensajes se hayan filtrado a la prensa tiene una motivación de
urgencia en la carta que los militares del chat mandaron el 10 de noviembre al
Felipe VI.
La primera estaba respaldada por 39 firmas de mandos pertenecientes a la XIX promoción del Aire. Francisco Beca Casanova y José Manuel Adán Carmona son sus impulsores. El 17 de noviembre, la misiva, impulsada por José Molina Zatarain y firmada por 39 mandos, tiene como destinatario a Sassoli, presidente del Parlamento Europeo OK DIARIO, con la intención de buscar una coartada ante las instituciones europeas, reacias a cualquier movimiento de esta naturaleza, con frases como "la acumulación de los poderes legislativo y judicial en uno solo, el ejecutivo, constituye la desintegración de nuestra democracia".
La tercera carta, fechada el 25 de noviembre, vuelve a tener como destino La Zarzuela y esta vez la promueven miembros de la XXIII promoción del Ejército de Tierra, como Francisco Fernández, cesado por José Bono, ministro de Defensa en 2006, por tener "un retrato del dictador Francisco Franco justo al lado y de proporciones superiores a las del Rey". carta de los militares
Estos comunicados son hechos públicos por medios como OK Diario,
que titula "No es golpismo, es patriotismo": disculpa no pedida,
culpa manifiesta. carta de los militares
Este hecho confirma que las intenciones declaradas en el chat de extender
el movimiento a otras promociones fueron ciertas y exitosas, es decir, que ha
habido una conjura de militares retirados con la intención de, al menos,
influir en el rey y buscar una coartada delante de las altas instituciones de
la UE. El ministerio de Defensa lleva el día 3 a la fiscalía del TSJM el chat
de Whatsapp publicado por Infolibre. La ministra Margarita Robles
declara que estas manifestaciones "repugnan el respeto debido en una
sociedad democrática. Las FFAA no deben ver perjudicada su estimación pública
por actuaciones que les son totalmente ajenas y que podrían merecer un reproche
penal". Lo cierto es que las declaraciones de la ministra no parecen
causar demasiada inquietud cuando ese mismo día se promueve un cuarto
pronunciamiento donde los militares esta vez se ofrecen para "revertir la
peligrosa deriva de nuestra Patria ante un Gobierno que ha cedido a comunistas,
golpistas y proetarras". Esta vez lo firman más de 270 mandos retirados,
que son quienes pueden hacer declaraciones políticas públicas sin incurrir en
una falta grave. Un número creciente de firmas que muestra tanto la insistencia
como el apoyo una vez que ya se ha conocido la filtración del chat, conocido ya
popularmente como el de "fusilar a 26 millones de hijos de puta".
Macarena Olona, parlamentaria de Vox, lo tiene claro: "son nuestra
gente", afirma en el Congreso.
Todo esto ha sucedido en este último mes de noviembre, sin apenas repercusión pública hasta la filtración. Felipe Alcaraz, antiguo parlamentario del PCE, ha escrito en sus redes sociales:mundo obrero Conversaciones de café, se dijo de los preparativos de la Operación Galaxia que terminó en el 23F. Felipe AlcarazConversaciones de chat con dos copas, se dice ahora de los fusiladores". Alcaraz sabe de qué habla ya que su grupo parlamentario denunció repetidamente en el Congreso las maniobras de agitación pública y privada que antecedieron al golpe de 1981. Aquellas de índole militar, pero también político, a cargo de los ultras de Fuerza Nueva y mediáticas, en aquel entonces publicadas por El Alcázar y firmadas bajo el pseudónimo colectivo de Almendros: "Hemos entrado en un tiempo protagónico para las otras Instituciones: el Rey y las Fuerzas Armadas [...]. Ha llegado la hora de recordar que el orden de prioridades es: España como patria común e indivisible, las instituciones del Estado y las libertades". Movimientos, no sólo en la milicia, que llevan a cadenas de pronunciamientos para crear un clima social de aquiescencia con el desalojo del poder Ejecutivo y Legislativo emanado de las urnas. 2020 no es 1981, ni vamos a presenciar un golpe por las armas, del todo improbable hoy. Lo que sí estamos viendo y hemos visto a lo largo del año son una serie de maniobras para lograr la caída del Gobierno tras un clima de oposición militar, judicial, mediática y de la parte más reaccionaria de la sociedad, silenciando al resto.
2. ¿Un caso aislado? La Operación Albatros.
¿Se reduce todo a la tentativa sediciosa de los militares que han firmado
las sucesivas cartas o hay algo más? José Ignacio Domínguez, el militar
demócrata que se ha atrevido a dar la cara en diferentes entrevistas, ha citado
la Operación Albatros como la denominación del complot para
lograr un Gobierno de concentración presidido por Margarita Robles, la ministra
de Defensa. ¿Cuándo es la primera vez que tenemos constancia pública de esta
supuesta operación o informe? El 21 de abril se publica en un pequeño digital
llamado Mil21 un artículo titulado "Aparece la Operación
Albatros para reconducir la situación política y económica",
Operación Albastro firmado por Joaquín Abad. El texto se acompaña de una imagen en la que se muestra una especie de dossier, en su portada se puede leer: "Operación Albatros. Simulación y etapas para su implementación de manera urgente ante la gravedad sociopolítica y económica que se prevé en los próximos diez años en España. Ejemplar 13/98. No enviar por sistema informático de la red. Los 98 ejemplares contienen clave individual que identifica su procedencia". El objetivo del mismo, según Abad, es "neutralizar a Pedro Sánchez y Pablo Iglesias".
¿Pero quién es Joaquín Abad, quien firma la información sobre la filtración
de Albatros? Su último libro, de julio de este mismo año, se titula
"La red secreta de Soros en España. Políticos, empresarios, diplomáticos,
jueces y periodistas al servicio del Nuevo Orden Mundial". Abad, también
empresario, es CEO de Cibeles Group, LLC, con sede en Miami, Florida, una
empresa dedicada "al desarrollo de software para la publicación
multiplataforma de ediciones electrónicas", pero que también edita Mil21,
el digital donde aparece por primera vez la Operación Albatros y
donde podemos encontrar artículos titulados como "Vacuna covid19
asesina" o "Por qué el Gobierno sigue ocultando 30.000 muertes".
Abad fue el director de Crónica de Almería durante 17 años.
Antes, alrededor de 1981, era el jefe de reporteros de El Alcázar,
donde aparecieron los artículos antecedentes a la intentona golpista. En una
entrevista, el propio Abad, presente en el Congreso el 23F, cuenta que fue Tejero
quien le hizo llegar su misiva, la misma noche del Golpe, para que la publicara
en la prensa. Es decir, 39 años después, el mismo periodista que recibe la
carta de Tejero es el que publica por primera vez, el 21 de abril de 2020, una
información en la que se habla de la Operación Albatros.
Fernando Reinlein, también un histórico militar de la UMD como José Ignacio
Domínguez, publica el 21 de mayo de 2020 en el Foro Milicia y Democracia un
artículo titulado "Los golpistas calientan motores". En el mismo explica
que:
"En España, y con motivos y razones suficientes, tenemos asociados los golpes de Estado con los militares. Pero en todos los que han sido, o en casi todos, ha existido un componente civil que ha fomentado, avalado y hasta financiado la acción militar [...]. Hoy existen ciertas acciones y actitudes que recuerdan aquello [...]. El objetivo es derribar, al precio que sea, a Pedro Sánchez y al gobierno ‘socialcomunista’ que vicepreside Pablo Iglesias.
Estos golpistas de
salón, de momento, disponen de un brazo político que es Vox, en el que se alzan
voces diciendo barbaridades para que Felipe VI intervenga y lo hagan también
los militares [...]. Y a todo eso hay que añadirle una cierta profusión de
panfletos y pretendidos informes, como el de la Operación Albatros, que
recorren ‘discretamente’ despachos y consejos de administración, que se parece
en su propósito al de aquellos generales que le hicieron llegar el suyo en 1980
al Rey".
Reinlein, en mayo, siete meses antes de la reciente filtración del chat, ya
categoriza a la Operación Albatros como un
"panfleto" para crear un clima de opinión favorable en
"despachos y consejos de administración". Además parece adelantarnos
las cartas y pronunciamientos de estas últimas semanas al comparar este complot
con las maniobras de calentamiento previas al golpe de 1981. Según la
herramienta de medición de tendencias de Google, entre los días 26 de abril y 2
de mayo es cuando el nombre de esta operación alcanza su mayor repercusión. Una
operación que, recordemos, pretendía crear una tendencia en la opinión pública
y diferentes esferas de poder para hacer viable un Gobierno de concentración presidido
por Margarita Robles, es decir, un eufemismo para torcer el resultado de las
urnas y expulsar, sobre todo, a Unidas Podemos del mismo, incluso a Sánchez de
no atenerse a las presiones.
Albatros parece revelarse como una profecía autocumplida, es decir, el intento
de otorgar legitimidad al complot descrito en el chat, dándole un toque de
mayor relevancia de lo que tenía, para que finalmente lograra ese estatus de
importancia, primero en los cuarteles y despachos, y más tarde en la opinión
pública. Daba igual que Robles fuera una convidada de piedra si con su supuesta
presencia se otorgaba de una cierta legitimidad democrática a aquel Ejecutivo
golpista, de la misma forma que sonaron otros nombres de diputados socialistas
para encabezar el Gobierno de concentración resultante de haber triunfado el
23F. Lo esencial es entender que la aspiración última era quebrar la voluntad
popular de las últimas elecciones y, por encima de todo, expulsar del mismo a
Unidas Podemos y al propio Sánchez si no se atenía a las presiones.
El 18 de abril el agitador Carles Enric agitador carles enric publica un tuit con el siguiente texto: "Confirmado La Moncloa. Margarita Robles aceptaría sustituir a Sánchez Castejón si hubiera un respaldo suficiente de diputados psoe y el respaldo de los partidos de la oposición PP, Vox, CS e incluso PNV. Todo con la garantía de unas elecciones en 6 o 12 meses". Obtiene más de 6.000 retuits y el 19 de abril a Robles, en rueda de prensa, le preguntan por tal posibilidad. Ella responde que esa no es una cuestión seria. El 20 de abril aparece en redes la etiqueta #RoblesPresidenta y antes del fin de mes se une a la de #MotínASánchez. El 22 de abril, en el cierre de la morgue improvisada del Palacio de Hielo, Robles pronuncia un sentido discurso que le da un momento de gran popularidad, compartido especialmente por las tribunas de la derecha mediática. Todo esto en la semana, recordemos, que Abad desvela Albatros. El 2 de mayo, en el paroxismo del encumbramiento de la ministra de Defensa por parte de la derecha y los ultras, Isabel Díaz Ayuso la nombra en el discurso institucional de la fiesta de la Comunidad de Madrid como la "nueva Manuela Malasaña". ¿Era todo producto del tuit de un vulgar agitador como Enric, una simple tendencia de opinión por el trabajo de la ministra o el resultado de Albatros? Es significativo que antes de estas semanas de abril, Robles es vejada por las cuentas de los ultras como cualquier otro ministro del Ejecutivo. Lo cierto es que Esther Palomera publica el 9 de mayo en El Diario una información en la que nos cuenta que "el malestar de Moncloa y el PSOE noquea a la titular de Defensa, tras verse convertida en icono de la derecha política y mediática contra Sánchez". Esther Palomera
3. Imponer un Gobierno de concentración.
Ya desde enero, con la sorpresiva aparición de la Junta Electoral Central complicando las negociaciones de investidura con los independentistas catalanes, el ambiente que se vive en los círculos de poder de la capital es de excepcionalidad.
Hay que impedir la formación de un Gobierno con
"comunistas y podemitas" como sea. Tanto es así que, recordemos, el
diputado de Teruel Existe recibe amenazas y tiene que pasar la noche previa a
la votación de investidura en paradero no revelado. Hermann Tertsch,
eurodiputado de Vox, escribe en Twitter el 2 de enero de 2020: "En estos días parece que todos los cómplices de
Zapatero desde el etarra Otegi a los comunistas Iglesias y Garzón se esfuerzan
por hacer inevitable la aplicación del Artículo 8 para que las Fuerzas Armadas
interrumpan un obvio proceso golpista de voladura de España como nación". En 1936, los militares
sediciosos también dijeron alzarse en armas por el bien de la República.
La idea del Gobierno de concentración ya ha sido usada en la pasada década en un par de ocasiones y con el mismo objetivo: evitar la entrada de Podemos en el Gobierno. La primera fue en 2016, el español Pedro Jota nombrada con resonancias alemanas como grosse koalition; la segunda, tras las segundas elecciones de 2019, lanzada por Cayetana Álvarez de Toledo. Pero es con la llegada de la pandemia cuando, tomado el 8M como casus belli, se intenta quebrar por todos los medios, aprovechando el desconcierto, al Gobierno.
El 10 de marzo El Español publica un editorial titulado "Un pacto de Estado, tal vez un Gobierno de concentración".El Español Jorge Bustos, jefe de Opinión de El Mundo, declara en sus redes el día 14 de marzo que habría que "depurar el Gabinete".
El día 29 de marzo se produce una concatenación de opiniones en la prensa digna de destacar.Pedro J. Ramírez publica una columna titulada "Gobierno de Concentración o concentración de catástrofes"el español entendería y aplaudiría que Sánchez formara un Gobierno de Concentración con Pablo Casado, Inés Arrimadas y tal vez Ana Pastor, como médica y ex ministra de Sanidad, en su núcleo duro [...]. Se trataría de un auténtico Gabinete de Guerra de no más de doce miembros, incluidos los actuales vicepresidentes y algunos de los ministros que ahora encarnan la autoridad única. Los demás podrían formar un segundo escalón de ministros y secretarios de Estado, en el que sería conveniente contar con representantes del PNV, Esquerra o incluso Vox, si se prestan a ello [...]. Estremece pensar en la nueva catástrofe a la que nos arrastraría cualquier programa de salida de la crisis, basado en su demagogia barata [de UP] contra el capitalismo, el derecho a la propiedad, la Sanidad privada y ‘los de siempre’. Si por ellos fuera, ya sólo habría empresas cerradas o nacionalizadas y ninguna receta económica dejaría de incluir la expresión 'nuevos impuestos'".
Ese mismo día 29 de marzo, Casimiro García Abadillo, director de El
Independiente, publica otra columna titulada "El paro puede
dispararse a los 4,5 millones: España necesitará un gobierno de
concentración". En ella opinaba que: "el Gobierno español acaba de
adoptar el pasado viernes una medida que, en lugar de dar flexibilidad a las
empresas, las ata de pies y manos prohibiendo (encareciendo) los despidos por
causas objetivas. Una baza que se apunta Pablo Iglesias en su pugna por dar a
este Gobierno un tinte izquierdoso poco recomendable [...]. Sánchez va a tener
que elegir. La presión de Unidas Podemos para que España se lance a un programa
de gasto público sin control va a ir en aumento [...] le guste o no, el
presidente tendrá que recurrir a un Gobierno de concentración si quiere, de
verdad, aprobar unos presupuestos de «reconstrucción nacional» que sean
creíbles".
EL INDEPENDIENTE También el 29 de marzo, en el digital de Luis María Ansón, El Imparcial, se publica una columna firmada por Antonio Domínguez Rey titulada "Urge un Gobierno de concentración nacional" articulo del imparcial. El autor opinaba que: "La decisión de instaurar un sistema democrático sólido era clara. Y hoy pretenden algunos minarlo desde un republicanismo no europeo, más bien bananero y sujeto al narcotráfico. Así hemos de entender la banalización de las instituciones, el auge de la miseria intelectual en los medios de comunicación, partidos y representantes políticos. Se quiere crear un contexto sociológico de incertidumbre, relativismo jurídico, descrédito democrático, pobreza moral, palabra fácil y desconcierto de la burguesía. El objetivo es la quiebra del Estado en pro de un sociorrealismo leninista [...]. Ante esta coyuntura, España parece indiferente, como sumida en una inercia social que la embota".
Al menos, podemos afirmar, que los militares de la tentativa golpista
estaban atentos a lo que se decía en cierta prensa en los días de la primera
ola en los que alcanzamos el pico de la curva, justo antes de entrar en las dos
peores semanas del confinamiento. Juan Carlos Escudier, en este mismo
periódico, publica el 31 de marzo un artículo titulado "El Gobierno de
concentración" articulo de juan carlos escudier, donde el autor resume al respecto de tan llamativa
coincidencia argumental que: "Emboscados en algunos medios de
comunicación, y bajo el disfraz de periodistas, existen unos personajes
omniscientes que cumplen la función de timoneles de la patria. Por muy
difíciles que se presenten las circunstancias, por muy enrevesada que sea la
encrucijada, siempre saben qué rumbo se debe tomar y por dónde habríamos de
conducirnos". Lo cierto es que después de leer al teniente coronel
Fernando Reinlein, del Foro Milicia y Democracia, afirmando en mayo que el
informe de la Operación Albatros se paseó por "despachos
y consejos de administración", la pregunta se hace pertinente: ¿Llegó este
informe a los despachos de los directores de algunos medios de comunicación?
¿Tuvo alguna influencia en la línea editorial de quienes pedían insistentes un
Gobierno de concentración?
La distancia, esta vez de un presente demasiado próximo, puede otorgar un nuevo significado a muchos acontecimientos que se dieron aquellas semanas, tan duras como claves para entender que en España se jugó con fuego a la hora de intentar desalojar al Gobierno de coalición. El 9 de abril, en sede parlamentaria, Enrique Santiago, secretario general del PCE y diputado de Unidas Podemos, afirma que el país está siendo sometido a una campaña de desestabilización terrorista, "una actuación criminal de bandas organizadas, que, reiteradamente y por lo común de modo indiscriminado, pretenden crear alarma social con fines políticos"video Enrique de Santiago.
El 19 de abril, Rocío de Meer, parlamentaria de Vox expresa en sus redes sociales que: "Hoy más que nunca es hora de recordarle al Ejército que la nación no es lo mismo que el Estado. Y ellos juran lo primero". Los comunistas advirtiendo de las maniobras golpistas, los ultras azuzándolas con tanta claridad como impunidad. Podría ser 1981 pero ocurrió hace tan sólo unos meses.
¿Cuándo tiene el concepto "Gobierno de concentración", buscado
coincidentemente por los militares golpistas de la Operación Albatros como
por algunas tribunas periodísticas, su máximo apogeo? Según Google entre los
días 17 al 23 de mayo, es decir, una semana después de que se iniciaran las
caceroladas de Núñez de Balboa: herramienta y objetivo. El día 11 de mayo se
produce el primer cambio de fase de desescalada decretado por el Gobierno. Ana
Rosa Quintana pronuncia esa mañana un duro editorial donde afirma que el
Gobierno está clasificando a los ciudadanos en categorías, con opacidad y al
estilo de 1984, la novela de Orwell. La presentadora pone tal
énfasis interpretativo en la lectura del editorial, "Desescalada hacia la
libertad", que el vídeo toma relevancia en las redes sociales. Esa misma tarde
se produce la primera concentración en Núñez de Balboa, calle de alto poder
adquisitivo situada en la ciudad de Madrid, que no ha pasado de fase. Será el
inicio de las caceroladas ultras. Como ven esta es una historia llena de
concatenaciones y casualidades.
4. El ataque de las togas
Desde finales de marzo, al menos, en Moncloa son plenamente conscientes de
que hay movimientos para descabalgar al Gobierno por la fuerza, no de las armas
sino de las togas. El 13 de abril escribo en este mismo periódico que "La
intención sería buscar cualquier resquicio en la gestión del Gobierno para
poner en marcha procesos que primero entorpezcan su actividad para llegar
incluso a su desalojo. Probablemente esas acusaciones se estén pensando y
escribiendo estos días. Que salgan o no del cajón dependerá en gran parte de
cómo resulta el fin inmediato de la crisis". El 25 de mayo, el juzgado de
Instrucción número 51 de Madrid imputa a José Manuel Franco, delegado del
Gobierno en Madrid, por un presunto delito de prevaricación al permitir grandes
concentraciones en las semanas previas al estallido de la pandemia en marzo.
Todo apunta a que el atrabiliario abogado que pone la denuncia, Víctor
Valladares, se precipita o actúa buscando notoriedad, complicando acusaciones
de mayor calado. No es casualidad que la mayoría de medios de la derecha eviten
dar el nombre del abogado y lo califiquen como la denuncia de un particular, ya
que el letrado había sido sancionado por estafa y otros delitos.
De la misma manera que afirmamos que los golpistas leían la prensa y
preguntamos si la prensa leía a los golpistas, cabe preguntarse cuál es la
relación entre la rama judicial desestabilizadora, los informes de la Guardia
Civil y la Operación Albatros. Mi opinión, y esta es una de
las primeras que doy en todo este análisis, es que esta operación resultó
exitosa en lo que se refiere a crear un clima en diferentes resortes de poder,
transmitiendo que "algo se estaba moviendo entre bambalinas", para
que, a modo de profecía autocumplida, un proceso golpista tomara cuerpo
realmente. Albatros es la constatación en papel de las
intenciones conocidas en el chat golpista, una operación a la que probablemente
se le fueron sumando adeptos impulsados por la inercia que otorga pensar que no
estaban solos, que tenían un enemigo que destruir, el "Gobierno socialcomunista"
y que los seculares salvapatrias de la nación, los militares, ya estaban manos
a la obra para hacer regresar a España al buen camino. Bajo ese paraguas más
épico-sentimental que realmente operativo, se consiguió, con la coincidencia de
algunas importantes voces de la derecha mediática, hacer llegar el mensaje de
que existía un movimiento organizado para hacer caer al Gobierno, dando un
impulso real al mismo.
5. Ultraderecha en las Fuerzas Armadas.
Que todo esto comenzara en el chat de unos militares retirados se entiende
por la imposibilidad, en los de activo, de hacerlo ellos mismos sin enfrentarse
a consecuencias penales: los propios firmantes del último pronunciamiento de
diciembre insisten en ello. Lo cual no implica que los constantes llamamientos
de la ministra Robles a la confianza en las Fuerza Armadas suenen ya manidos.
Lo primero porque estos militares retirados estaban, en su mayoría, aún de
servicio hace tan solo década y media, lo segundo porque, tal y como explicó
Carlos Enrique Bayo en este mismo periódico el 8 de julio de 2020:
"La presencia de la extrema derecha en las Fuerzas Armadas no es algo
nuevo. Pero la llegada de Vox a las instituciones ha permitido su constatación.
Así, hace año y medio, dos de los doce diputados que fueron elegidos por el
partido ultra Vox en las elecciones andaluzas tenían orígenes militares [...]
en las generales de abril de 2019, al registrarse el doble o más de votos a Vox
en los municipios que albergan bases o acuartelamientos que los obtenidos por
ese partido en el resto de esas circunscripciones electorales [...] distintas
fuentes militares (varios retirados y uno en activo) indican a Público que
el auge ultraderechista se ha intensificado en el seno de las Fuerzas Armadas
con la crispación política".
En el artículo de Bayo explica, además, que Público se
había puesto en contacto con Defensa para comprobar si el ministerio estaba
llevando a cabo investigaciones para determinar el grado de infiltración de los
ultras en el Ejército, no sólo como ideología, algo que parece obvio, sino como
un movimiento político organizado, a lo que se contestó que "para abrir
una investigación tendría que haber algún indicio sospechoso y no hay
denuncias, ni hay actuaciones, ni hay datos". O discreción respecto al tema
o la táctica del avestruz. Esta situación, reflejada en las múltiples cuentas y
grupos en redes sociales, de supuestos militares en activo, profiriendo
amenazas violentas contra "los rojos", no era desconocida para los
militares del chat golpista. Como tampoco lo es para Vox.
El partido de ultraderecha ha mostrado en estos meses coincidencias
argumentales con la Operación Albatros y en el chat del grupo
se escuchaba un mensaje de Abascal, realizando, eso sí, un saludo genérico. Las
declaraciones de Tertsch, Olona o De Meer han sido diáfanas en la defensa de
los sediciosos y el llamamiento a una actuación de las Fuerzas Armadas contra
el Gobierno. No podemos afirmar que Vox tuviera un papel directivo, sí podemos
afirmar que su papel fue coincidente en tiempo, forma y argumentario con los
miembros del chat golpista. No en vano, el 3 de marzo, cuando el coronavirus
está a punto de arrasar España, Javier Ortega Smith pronuncia un encendido
discurso delante de miles de policías y Guardias Civiles que rodean el Congreso
con la excusa de la equiparación salarial. El mismo líder ultraderechista del
que conocemos un vídeo el 4 de febrero de 2020 disparando un fusil de asalto en
una base de la Brigada Paracaidista de Murcia, que provocó el cese del Coronel,
el 29 de septiembre, encargado del curso del CESDEN en el que participaba Smith
en calidad de diputado.
6. "Cierre al salir"
"Cierre al salir, señoría". Así despachó el vicepresidente
Iglesias en la comisión de Reconstrucción a Espinosa de los Monteros, número
dos de Vox. Sucedió el 28 de mayo y, como ya es habitual, en el mejor de los
casos se repartieron culpas entre los implicados, en el peor se acusó a
Iglesias de ser el causante del incidente, en el que el diputado ultra abandonó
la sala del Congreso visiblemente enfadado. Todo el mundo pareció quedarse con
la sonora expresión con que Iglesias despidió a Espinosa de los Monteros pero,
¿qué la había precedido? "Aunque a veces parezca que Vox quiera más dar un
golpe de Estado que proteger la democracia española, estoy dispuesto a dialogar
con cualquiera", fueron las palabras del vicepresidente, que tras las
protestas del diputado de Vox, fueron ratificadas en un tono de seguridad en lo
que se afirmaba: "Creo que a ustedes les gustaría dar un golpe de Estado
pero no se atreven". Hoy, tras la filtración del chat, tras conocer los
movimientos de los militares, tras las cartas y pronunciamientos, tras este
largo análisis de cómo sucedieron los hechos, las palabras de Iglesias parecen
más una afirmación que un desaire.
Lo cierto, como conclusión, es que el movimiento de los militares golpistas
ha resultado un fracaso en sus fines, quedando en una tentativa, es decir
"cuando, con el objetivo de cometer un delito, ha comenzado alguien su
ejecución por medios apropiados pero no se consuma por causas ajenas a su
voluntad". Lo cierto es que el informe de la Operación Albatros ha
existido más como una forma de dar legitimidad e impulso a ese movimiento que
como una operativa con capacidad de ponerse en marcha realmente. Lo cierto es
que, a pesar del fracaso, la infiltración de la ultraderecha como movimiento
organizado en las Fuerzas Armadas parece una amenaza. Lo cierto es que los
pasos que los militares describieron en el chat, implicar a otras promociones e
influir en el rey y la opinión pública mediante cartas y manifiestos se han
producido y se producen. Lo cierto es que, según los militares del Foro Milicia
y Democracia, este movimiento tenía el objetivo de arrastrar a otras esferas de
poder, mediáticas, económicas y jurídicas. Lo cierto es que se dieron
coincidencias en tiempo y forma con las peticiones de varios medios de
comunicación por un Gobierno de concentración, el mismo eufemismo empleado el
23F para nombrar al Ejecutivo títere tras el golpe. Lo cierto es que el
periodista que publicó la carta de Tejero en 1981 ha sido el mismo que publicó
la Operación Albatros. Lo cierto es que la opinión pública
merece conocer los movimientos espectrales que se han dado en estos últimos
meses, en los que una parte del país se dejó la piel luchando contra la
pandemia, mientras que una minoría jugaba con fuego al no aceptar al Gobierno
democráticamente elegido.
España arrastra en estos últimos dos siglos todo un triste, oscuro y
trágico historial de pronunciamientos y golpes de Estado ejecutados por
militares pero amparados, financiados, dirigidos y extendidos por actores
civiles del mundo del dinero, la política y la comunicación, antes en
linotipias, ahora con agilidad digital. Golpes de Estado que nos costaron
cientos de miles de muertos y exiliados, guerras civiles y que dejaron al país
en un atraso sistémico. Quiebras históricas que se produjeron cuando la mayoría
social del país quería avanzar, librarse de la losa y la cadena de la reacción.
Esta vez ha de ser diferente. Esta vez se exige valentía a las autoridades para
que dejen de tapar estas infames acciones con la esperanza baldía de que se
agoten en sí mismas. Esta vez se reclama a los militares demócratas arrojo y
patriotismo para enfrentarse y no mirar para otro lado cuando las Fuerzas
Armadas y los cuerpos policiales sean utilizados para la sedición. Los
ciudadanos mostraron su agradecimiento a la tropa y a la Policía por su labor
en la pandemia, es una traición infame y una tara moral rebelarse contra las
personas que aplaudían desde los balcones.
Los cuarteles, los despachos en los rascacielos, aquellos donde se maneja
la información, han de tener claro que hoy, en este país, la mayoría de los
ciudadanos no van a aceptar que nadie crea tener la capacidad de usurpar su
soberanía. En la pasada década, tras lo que fue un golpe financiero, millones
de personas salieron a la calle en multitud de ocasiones. Diez años después el
país ha cambiado, le pese a quien le pese. Eso es, más allá incluso del propio
Gobierno, lo que provoca estos movimientos desesperados. Eso es lo que
realmente temen los golpistas, con uniforme o traje: el que ustedes, los que
hacen funcionar y construyen el país, sean conscientes de su verdadero y
legítimo poder.
ENLACES DE CONSULTA
31 Agosto 2018
Web de Asociación Militares Españoles (AME)
DECLARACION DE RESPETO Y DESAGRAVIO AL GENERAL D.FRANCISCO FRANCO BAHAMONDE. SOLDADO DE ESPAÑA
MANIFIESTOS CONTRA EL FRANQUISMO EN LAS FUERZAS ARMADAS
Manifiesto de Militares contra el Manifiesto Franquista
Web de militares antifranquistas
Asociación Unificada de Militares Españoles
web conversaciones con la historia
Militares del Chat que pretenden un golpe de estado
Debate ¿ruido de sables? ó intento de derribar al Gobierno de Coalición
La ultraderecha intenta apropiarse del ejército y la monarquía
movimiento golpista, más allá de la trama
Alemania fulmina una unidad de élite de su ejército por sus lazos con la extrema derecha
El inquietante pasado del último general de Vox en el Congreso
Esquiadores del Ejército cantan grandes éxitos de la ultraderecha en un desfile por la calle Atocha
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